La Habana- En la tercera parada de su primera gira por Centroamérica, la compañía cubana Ballet de Camagüey cautivó al público panameño en el emblemático Teatro Balboa de esta capital.

Los 12 talentosos bailarines, dirigidos por Regina Balaguer, llegaban de exitosas presentaciones en la Gran Sala del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, de Ciudad de Guatemala; y en el Teatro Presidente, en San Salvador.

De inicio a fin, este sábado, el espectáculo único «Gran gala de estrellas» también en el istmo acaparó aplausos y ovaciones en honor a la interpretación de cada momento del programa con obras de corte clásico, neoclásico y contemporáneo.

La maestra Balaguer precisó que las piezas clásicas como el pas de deux de «Diana y Acteón», el pas de deux de «Giselle» y el pas de deux del segundo acto del «Lago de los Cisnes», fueron los primeros platos fuertes.

Somos una familia, indicó al referirse a la necesidad de un mayor acercamiento e intercambio entre los colectivos danzarlos de la región.

En ese sentido, dijo, nos complace ser como embajadores de la cultura, del arte y además poder abrir otro espacio a la integración de América Latina y el Caribe.

Sobre esos y otros temas, los jóvenes representantes de la icónica compañía, tuvieron la oportunidad de intercambiar con la ministra de Cultura, Gisselle González, y en particular Balaguer resaltó los diálogos con Graciela “Chelita” Guillén, directora artística del Ballet de Panamá.

A futuro, según explicó, esta gira devino también una puerta abierta a la mayor colaboración e intercambio de profesionales de la danza, lo que también contribuirá a la necesaria retroalimentación.

Es esta, aseveró, nuestra primera presentación en colectivo en Panamá, pues antes en 1999 nos representó solo una bailarina en el Festival de Ballet y en mi caso impartí cursos.

Del actual repertorio, Balaguer destacó obras neoclásicas como «Majísimo», «Aguas primaverales» y «Muñecos»; y entre las piezas contemporáneas «Peregrinos» y «La muerte del hombre».

Esta vez, en la escena panameña, el virtuosismo de sus jóvenes bailarines quedó mostrado por quienes brillaron como dignos exponentes de la escuela cubana de ballet, creada por el maestro Fernando Alonso.

La gira centroamericana de este colectivo continúa y finaliza hoy con presentaciones en los teatros Bonilla y Saibe en Tegucigalpa y San Pedro de Sula, Honduras.

El Ballet de Camagüey, fundado en 1967 bajo la dirección de Vicentina de la Torre, es la segunda compañía de ballet más importante de la isla.

Desde su primera gira global a Checoslovaquia y Rusia, en 1978, nunca dejó de irradiar su arte, complacer a los gustos más exigentes y de encantar con la excelencia.

Por Redacción ACN

Foto: Tomada de prensa-latina.cu