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Camagüey, 15 nov.- La juventud cubana como fiel cantera del futuro se levanta firme ante cada tarea, en su alma germinan la voluntad y el compromiso de todo un pueblo, la brisa cálida de lo posible derriba cualquier barrera, el sentimiento de una edad que aprende de todas las generaciones.

En Camagüey, los jóvenes son protagonistas y se materializan a diario, empinan ideas para potenciar una recreación sana y novedosa que mueva a los más inquietos de casa.

No hace falta un día para levantarse motivado al escuchar el cantar de un gallo y el vaivén de las olas del mar, ese detalle único vive perenne en los lugareños de ayer y hoy que matizan la más bella historia juvenil.

Pero los jóvenes camagüeyanos no solo se insertan en la esfera social sino que aportan al desarrollo económico y político desde las industrias, la agricultura y hasta en las formas no estatales de trabajo.

Debemos ocuparnos de preservar la juventud y la Revolución, los tiempos que transitan ameritan una gran dosis de humildad, modestia y valentía.

Siempre existirán, como dijo Fidel, poderosas fuerzas que enfrentar, dentro y fuera del país, pero es de jóvenes triunfar, como expresó Martí.

Podremos cambiar muchas cosas. Ganar en eficiencia, disciplina, control y ahorro, en más justicia y equidad, un mejor Socialismo, pero como alertó el Comandante en Jefe: “Si los jóvenes fallan, todo fallará”.

Sin el ímpetu, la pasión y la energía de los jóvenes, nada será posible.